Junto al estanque del ángel decapitado se pudre una cruz de palo que señalaba una muerte falsa; en el fondo del agua, entre el cieno espeso, de lo que fue una corona de flores hechas con miga de pan, únicamente queda un círculo deforme de alambre oxidado y ojos de muñeca dispersos como testimonio de un deseo jamás cumplido.
Norberto Luis Romero en La noche del zepelín (1999)
Añadido por Dan Costinaş
¡Comentar! | ¡Votar! | ¡Copia!
